La Primera Asignatura

Hoy tuve mi primera clase de la electiva conocida como "Caricatura". Es emocionante contar que desde mis primeros semestres en mi casa de estudios conocí la materia y me propuse que cuando estuviese en 9no la tomaría como electiva. Evidentemente han pasado un par de años, sin embargo surgieron diversos problemas y fue cancelada. No obstante como arte de magia el día de hacer horarios, reapareció y pude inscribirme. Mis expectativas son altas porque es una clase para divertirse y aprender, como siempre me voy por las ramas. Lo importante del asunto fue la dinámica para iniciar la clase, tuvimos que hacer nuestro propio clasificado, si cual periódico, vendiéndonos a nosotros mismos, resaltando virtudes.

Pase unos minutos frente a aquella hoja de papel a rayas, pensando que poner, como describirme a mí misma. Iba paseando por mi mente, de lado a lado, pensé entonces "Pondré que soy escritora", pero luego me dije "Escribir un blog quizás no te defina como escritora, es decir, contar un par de anécdotas no te convierte en una gurú de las letras". Me detuve y seguí buscando que poner en aquella hoja de mi libreta, bilingüe fue lo primero que coloque, si bien es cierto me enorgullece poder hablar y entender otro idioma. Continué poniendo que soy extrovertida, porque eso de quedarme callada no va mucho con mi manera de ser y en ese mismo instante voltee la mirada hacia mis amigas, hacia mis compañeros y note que esa disputa se estaba llevando a cabo solo en mi mente, nadie me juzgaba, era una descripción a libre albedrío. 

 ¿Por qué no puedo ser escritora? Si es lo que amo ser, ¿Por qué no puedo poner lo que soy? Yo me considero multifacética, una romántica empedernida, a veces ácida y muy sarcástica. Pero lo más importante es que soy autentica y no necesito de la aprobación de nadie para ser feliz como soy. Tras unos segundos de epifanía, tome mi portaminas y me inspire, puse aquellas cosas que amo hacer, esas de las que orgullosamente puedo presumir. Entonces entendí que esa asignatura no era para que mis compañeros supieran quien soy, sino para que yo me diera cuenta que uno es quien quiere ser.

Parece un poco loco, que haya sacado una gran moraleja de algo tan sencillo, pero la verdad creo que todos en algún momento de la vida nos subestimamos a nosotros mismos. Quiero decir, que podemos llegar a perder la fe y eso es verdaderamente triste, pues si tu no crees en ti ¿Quién lo hará?. Estudiando en una universidad donde hay muchas profesiones, me doy cuenta de lo variada que es, ya que puedo encontrar diferentes clases de personas. Estan esas que se sienten bien consigo mismas, tienen un autoestima alta y no temen demostrarlo. Luego esas que aún no saben quiénes son, pero fingen tener gustos populares para ser aceptados.  Y por último aquel grupo de personas malas, quienes juzgan a todos y se dedican a envidiar a los demás, simplemente por el hecho que no pueden igualarlos, no por falta de talento, sino porque ellos han decretado el fracaso en sus vidas.

En lo personal prefiero incluirme en el primer grupo, pues amo mi manera de ser, aún con defectos y virtudes. Siempre he creído que para que tu luz brille, no debes apagar las otras luces, sino que debes destacarte por hacer bien las cosas y ser la mejor versión de ti mismo.

"Nadie está a salvo de las derrotas. Pero es mejor perder algunos combates en la lucha por nuestros sueños, que ser derrotado sin saber siquiera por que se está luchando" Paulo Coelho

Sin más que decir! Se despide por esta noche #PeriodistaNoctambula ❤