"Yo no vengo a decir un discurso”







Una meta no es más que un deseo por cumplir, un anhelo que proviene de lo más profundo de nuestro ser y para verla convertirse en realidad es necesario poner todo nuestro esfuerzo en pro de la misma. Ninguna persona ha llegado lejos esperando que las cosas pasen por sí solas. Una persona exitosa sale de su zona de confort a buscar nuevos retos y traza su camino sabiendo que conseguir lo que quiere no será fácil pero tampoco imposible.


Se dice que para alcanzar el éxito hay que desechar el miedo, incentivar la constancia y conocer la disciplina. ¡Pero la verdad es que yo solo tuve un golpe de suerte!. Se preguntaran quien soy y porque estoy aquí hoy. En las redes sociales me conocen con un nombre pero es irrelevante es este momento. Soy un joven venezolano como ustedes, cuya vida se ha basado en esfuerzo y trabajo duro para conseguir mis metas.


Empecé a trabajar a temprana edad, no tenía más que 11 años cuando me enamore de la radio. No obstante, me vi obligado a madurar en un mundo plagado de adultos, entonces comprendí que para llegar alto no solo hace falta tener talento sino también disciplina y esforzarse al máximo. Hoy en día con 21 años, puedo decir que cada reto que se me ha presentado en la vida lo he superado gracias a mi constancia y arduo trabajo.


Les diré que a lo largo de mi carrera he tenido la oportunidad de trabajar con diferentes empresas, he conocido centenares de personas y he adquirido muchas experiencias enriquecedoras, pero hoy no vengo a hablarles de mi. Hoy vengo a decirles que todo es posible, que ninguna meta es tan alta como para no poderla alcanzar, pues la receta del éxito a mi parecer tiene tres ingredientes ESFUERZO, DISCIPLINA Y CONSTANCIA.


¡No se inquieten! pues como diría el gran maestro Gabriel García Márquez: “Yo no vengo a decir un discurso”, yo simplemente vengo a compartir un poco de mi experiencia con ustedes, tal como me habría gustado que la compartieran conmigo en su momento. Como toda persona he tenido momentos difíciles, días buenos y días malos pero los he superado siempre cargado de energía positiva y convicción. Ya que no importa que tan inclinada sea la colina, pues al llegar a la cima podrás apreciar del paisaje.


Siendo periodista tengo varios modelos a seguir, quisiera llegar tan lejos como ellos lo hicieron, pero no me refiero solo a la fama que alcanzaron, ya que esta es tan efímera como la vida misma. Sino por lo duro que trabajaron y el legado que han dejado a todos nosotros. Debemos ser personas con grandes valores como Renny Ottolina, tan sabios e inteligentes como Uslar Pietri y profesionales íntegros como Eleazar Briceño.


Hay que dar siempre todo de nosotros para conseguir nuestros sueños, aunque eso implique aprender a sobrellevar el fracaso. Muchos dicen que si te caes diez veces debes levantarte once, pero yo creo que nadie debería caerse y si no puedes evitarlo entonces hazlo con dignidad y levántate con muchas más ganas. Pues ninguna batalla se ha ganado en la historia sin primero haberla librado.


En el camino al éxito conocerán muchas personas, la mayoría de estas solo querrán verlos fracasar pero que eso no los detenga, al contrario, usenlos como su motor para llegar a lo más alto. Cuando la gente habla de ti significa que tus triunfos les hacen ruido, como dicen por ahí que hablen bien o mal pero que hablen. Deben saber que los más grandes no siempre fueron populares, no obstante, a su lado estuvo la gente correcta, sus verdaderos amigos.


Me repito constantemente a mi mismo que la práctica hace al maestro, pero yo le agregaría a esa frase que todos los días aprendemos algo nuevo, por lo cual jamás debemos pensar que no las sabemos todas y más. En este mundo no hay que ir jactándose de lo que hemos conseguido, ni vanagloriándonos de ser los mejores, dejemos que nuestro trabajo hable por nosotros, así de simple. Y tengamos presente que ninguna estrella brilla esperando que las otras se apaguen.

Hay muchas oportunidades a lo largo de la vida, no todas tocaran a sus puertas pero si se lo proponen conseguirán incluso más de lo que han soñado. Sientanse orgullosos de quienes son y de dónde han venido, propónganse nuevos retos cada día, trabajen honestamente y busquen siempre la excelencia. Siempre recuerden que no hay límites para los sueños y como yo siempre digo ¡El que quiere, puede!



Un discurso de una noche casual, para una persona especial.
#PeriodistaNoctambula

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