Venezuela… Ya no se decirte

Antes solía recitarte un par de poemas, solía recorrerte de pies a cabeza mentalmente y pensar en la tristeza de haberte perdido sin conocerte de un todo. Pero hoy no se que decirte, mi bella Venezuela, tan golpeada y abusada por tus propios hijos, tu bella dama que nos regalaste los mejores días y la niñez más feliz que cualquiera imaginaria. Tierra noble que recibiste a millones de hijos ajenos y los volviste tuyos ¿Venezuela que te han hecho?

Hoy fue un día un tanto sensible, cada venezolano o al menos aquellos que aún tenemos la decencia de llamarnos tus hijos nos sentimos tristes no solo porque el grupo de delincuentes que te preside se ha salido con la suya una vez más, sino porque millones de personas han perdido la esperanza nuevamente.  Hoy fue uno de esos días donde es más fácil callar, pues no había absolutamente nada positivo en perderte una vez más.

Desde la distancia te contemplo, tan bella, tan fértil y tan mía como siempre lo has sido, pero tan deteriorada y marcada por la desdicha. Hoy mi amada tierra eres sinónimo de pobreza, sinónimo de lucha y de devastación. A veces siento que no podré lidiar con el dolor de tenerte lejos, porque aunque como muchos no te aprecie cuando te tuve, hoy te lloro más seguido de lo que quisiera admitir.

Ayer se burlaron tanto de ti como de millones de tus retoños, jugando otra vez con sus ilusiones, con el futuro de miles de niños, con la esperanza de algún día poder volver a tus laderas. Algunos me llamaron incrédula al dudar de aquel proceso tan familiar, ese donde mediante el sufragio elegimos quién va a llevarte aún más bajo o te ayudara a subir como la espuma ¿Pero quién puede realmente jugar cuando la partida está arreglada?

Tanta desesperanza fue la que vi, tanta decepción plasmada en los rostros de tu gente. Y con un contraste casi sádico, pude apreciar como los malnacidos gobernantes se jactaban del poder que tienen. Ese poder basado en miedo, manipulación y la corrupción del sistema. Ay tierra bendita ¿Qué te han hecho?

Quisiera poder pintarte un porvenir dichoso y próspero, quisiera verte libre y levantándote de la cenizas cual fénix,  quisiera devolverte la magia que parece perdida pero por ahora solo me queda luchar para que no te borres de mi mente ni de mi corazón. Luchar para que cada vez que alguien hable de ti lo haga con orgullo y respeto, luchar para que todos sepan lo magnífica que siempre has sido y serás. Luchar para que un día mis hijos conozcan tus innumerables placeres y les regales entonces la dicha de amarte como yo te amo.

Venezuela, este centenar de palabras se quedan cortas ante ti… Porque solo tu madre sabes lo mucho que has perdido y lo mucho que te han maltratado. Pero no decaigas tierra hermosa que la justicia a veces tarda en llegar pero siempre es certera. Esperare entonces pacientemente para estar nuevamente en tu regazo.

#PeriodistaNoctambula